martes, agosto 08, 2006

Marrakech a primera vista



Al llegar al aeropuerto, incidente en aduana con mi profesión (no es fácil explicar que una es locutora de radio), y es que aquel tipo, el policía de la frontera, gendarme para ellos, me preguntaba en que emisora trabajaba, pues si había entendido que fuera locutora de radio.. Pero yo estaba cansada y no le comprendí, así que se me fue la mano al gesto que sin pensar fue demasiado descriptivo... La tercera, y la más duradera, pues sería la broma más frecuente durante todo el viaje...
Tras el pequeño malentendido y unas risas por parte del gendarme, salimos de aquel aeropuerto que, la verdad, después de la enorme T-4 se nos antojó pequeño. Tras unos enormes y dulces ojos negros se escondía sonriente Yousseff, el primero de nuestros guías. Amablemente nos explicó que nuestro hotel era el hotel Ayoub.
Y empezó nuestra expedición por medio de Marrakech. Yousseff nos comentaba las avenidas y barrios que atravesábamos, pero en el fondo no escuchábamos. No tenía ojos bastantes para abarcar cada calle, cada luz, cada edifició que veía ante mi... Durante un momento pensé: "Vaya, pues aquí no conducen mal, debe ser sólo en Egipto" pero eso me duró lo que dura un pensamiento pues antes de acabar de formular la frase en mi cabeza, el conductor del autobus casi se avalanza sobre unos chicos que cruzaban la calle... Todavía me estaba reponiendo del susto cuando de pronto una moto se cruza en su trayectoria, la cual no varía ni un centímetro y yo con el corazón en un puño mientras aquel loco del volante parecía estar en plena partida del carmageddon..

Medio infarto después y cuatro bocanadas de aire rápidas, llegamos hasta nuestro hotel. Ante nuestros ojos un edificio rosa, del mismo color que los sueños que poco a poco tomaban forma, y una sonrisa... bueno unas risas (todavía nos duraba el efecto de nuestros malentendidos).

Bajamos del autobús tres parejas, y entonces me di cuenta que ahí estaba aquellos dos que en la aduana de la T-4 me habían llamado la atención, el chico muy alto y la chica muy rubia... Habían venido con nosotras en el avión. Y también vi a aquella otra pareja, no me fijé mucho en ellos. Pero ellos sí se fijaron en nosotras y nuestras risas, que no paraban. Ya no podía más que llorar de tanto reír. Allí estábamos, en aquel recibidor que se nos antojó especialmente bonito, con sus pequeños taburetes, sus mesitas de mosaicos coloridos, mosaicos en las paredes, ese conserje... (nunca imaginé que los hombres de Marruecos pudieran llegar a ser tan guapos). Resultaba tan complicado rellenar esa dichosa ficha que, por cierto, siempre hay que rellenar en este país. Y otra vez la preguntita de marras... En que trabajo. Pues esta vez no pienso explicarlo, que luevo viene el cachondeito. Y de donde venimos (Y de paso a donde vamos) Pues venimos de Valencia, y entonces Yousseff, desde esa mirada encantadora (me perdí en esos ojos una y mil veces) nos explicó entre nuestras risas (no había forma de parar de reír) que no era de donde veníamos realmente, si no desde donde había salido el avión...
Y allí estábamos, las dos, con la risa como único lenguaje, con nuestras enormes maletas, nuestras mochilas y nuestra ilusión. Con la felicidad como abanderada y con esas miradas, esos ojos que nos miraban sonrientes desde el otro lado del estand de recepción. Y Yousseff, mirándonos y aguantando la sonrisa, por no resultar poco correcto, mientras nos despedía amablemente hasta el día siguiente, no sin antes dejarnos su número de teléfono, por si ocurría alguna incidencia más en el viaje... No volvimos a vernos, lástima.
Besos y sed felices

6 comentarios:

El chicharrero terrible dijo...

Gran blog, con contenido vital.
Me gusto lo de las caricias.
No te preocupes por el arroz, hoy en día no se pasa nunca.
Te seguiré la pista.

Juan dijo...

Con que intensidad se viven los viajes ¿eh? Es como que las sensaciones, o mas bien la capacidad de sentir, se multiplican por mil. Te sientes vivo, y absorves cada detalle como si de una vida se tratara...ains tata (como deciis vosotras) je je. Quien pudiera currar de presentador de los docus de la 2....

Esther Hhhh dijo...

Chicharrero, un placer verte en mi blog, me encantará leer tus comentarios. Bienvenido.
Juan, tete, jejeje, yo me apunto contigo a presentar esos docus, no veas la envidia que me da el tipo ese que viaja por ahi y además en plan barato... Y la chica que también viaja, apuff... De momento te invito a que sigas conociendo Marruecos desde mi particular punto de vista...
Besitos, petonets y muxus para ambos.

Ruben dijo...

Al final voy a acabar conociendo Marruecos como si hubiese estado alli... viajar sin moverme del teclado jejeje... ya espero la proxima entrega.

BAR dijo...

ACABO DE LEER EL BLOG DE PANDO, ES BUENO SABER SUS EXPERIENCIAS EN EL VIAJE, Y YA ME ENTEE DE ESE GUIA QUE TE CAUTIVO, VEO QUE DE VERDAD NO LA PASATE TAN MAL, ME DA GUSTO. BESOS...

Esther Hhhh dijo...

NO BAR a decir verdad lo pasé de miedo, jejejejejje..
Besitos